lunes, 6 de abril de 2009

Music & Laughter (I)

Triste pero cierto: he de inaugurar la tercera sección de Hilarísticos rogando disculpas a mis escasos lectores. A pesar de que en el manifiesto te todo buen blogger figura una norma totalmente acatable, el no estar sujeto a horarios de publicación, sentía abandonado este preciado rincón. Y ahora, sin más dilación, os hablaré de los protagonistas de esta entrada.

Los descubrí por casualidad, como quien no quiere la cosa. Había sido un día bastante duro y acudí a casa de unas amigas para aliviar las penas. Ellas estaban escuchando música cuando abrieron la puerta del piso y me dieron la bienvenida. Pero no era una música cualquiera, sino una serie de melodías hilarantes, ridículas pero familiares, que me hicieron sufrir grandes ataques de risa. ¿Que qué clase de música era esa? Los Gandules, un dúo zaragozano al que no merece perder de vista en momentos de bajón.

Lo habitual es que, al escuchar por primera vez a Los Gandules, se frunza el ceño, se esboce una mueca de asco y se diga: "¡Menuda ridiculez!" Pero, conforme se va prestando atención a las absurdísimas letras, todas ellas sobre un fondo de canciones conocidas por todos, la sonrisa se va ampliando y es natural que se acabe llorando (literalmente) de la risa, a no ser que se carezca de sentido del humor.

Por eso dedico esta entrada a una gran formación, unos tíos de andar por casa, que suben al escenario en zapatillas, calzoncillos y albornoz, sentándose en un sofá guitarra en mano y aludiendo a su gandulería (el mismo nombre del grupo lo confirma), al tiempo que intercalan chistes y excelentes monólogos entre las breves y contundentes canciones. Esto no son meras suposiciones o afirmaciones basadas en información internáutica: los he visto en directo. Y he de asegurar que son tremendamente geniales.

También es totalmente cierto que ya tienen tres discos de estudio y una pizpireta cantante, además de medios técnicos nada desdeñables. Han estado presentes no sólo en conciertillos de poca monta, sino que han actuado en lugares tan concurridos como los festivales de Interpeñas, durante los Pilares zaragozanos. No sólo como músicos, sino también como pregoneros, ojo al dato.

Damas y caballeros, con ustedes Tobo y Dun Gandul, más conocidos como Los Gandules.






Sus dos exitazos, en videoclip: Paté de Pato y Miguel Ángel. Y su baile más freak: Escafandra.
Tienen página web oficial, como todo buen grupo musical.
No paséis por alto su gloriosa intervención en el programa A tu lado, en el que expusieron su filosofía de la vagueza: parte 1, parte 2 y parte 3.

Imágenes: Picasaweb y de cosecha propia.

miércoles, 18 de febrero de 2009

Veo, veo... (I)

No podía inaugurar esta sección si no era con mi sketch favorito de mi programa de humor favorito. Muchachada Nui es típicamente español, y cuando hablo de "típicamente español" me refiero a ello en el más sentido estricto de la palabra. Humor tontuno, parodias extravagantes y personajes con tonillo paleto hacen de este programa, que hoy mismo comienza su tercera temporada en La 2 a las 23:15 de la noche, uno de los imprescindibles para desconectar de la realidad y echar unas buenas risas. Disfrutad de este capítulo de Mundo Viejuno, una hilarante fórmula tomada de espacios como Retrospect (La Hora Chanante) o algunos de los doblajes más famosos del mítico y desaparecido El Informal.



Para conocerlos más, visitad su página web.

lunes, 16 de febrero de 2009

El humor en el mundo (I)


La mejor de las curas

¿Sabías que tener pensamientos agradables estimula la creación de defensas en nuestro organismo? ¿Y que echar unas buenas carcajadas durante veinte segundos es el fármaco perfecto para ejercitar nuestro corazón sin necesidad de ejercicio físico alguno?

Reír es una auténtica medicina. No sólo es algo divertido y alegre, que provoca que alejemos de nuestra mente, aunque sea por un momento, los malos pensamientos. Más aún: es la mejor arma contra el estrés y un modo excelente de mejorar nuestra salud sin apenas esforzarnos.

La risa es una receta bastante convincente para sentirnos bien: estimula la producción de endorfinas (conocidas coloquialmente como hormonas de la felicidad), da lugar a bajadas de presión arterial... ¡e incluso puede despejar nuestros pulmones! Los ataques de tos que nos entran tras reírnos flojamente durante un buen rato no son tan malos como pensamos.

Lo que está claro es que reír, en términos generales, contribuye a que gocemos de bienestar físico general. De hecho, algunas empresas no han dudado en potenciar el buen humor por medio de iniciativas para aumentar el rendimiento laboral de sus trabajadores.

Si acaso os cuesta más de la cuenta y no podéis cargar con tanto estrés, la solución más entretenida la encontraréis en una nueva revolución: la de los talleres de risoterapia.

¡Fuera la seriedad y arriba el optimismo!


Basado en información extraída de ViviendoSanos y En plenitud.
Imagen tomada de flickrCC.
Para profundizar más en el tema, nada mejor que conocer a reputados investigadores como Michael Titze o el pionero William Fry , e incluso echar una ojeada a cosas tan curiosas como la celebración de un Encuentro Internacional de Investigadores del Humor.

viernes, 13 de febrero de 2009

La tira (I)

Calvin y Hobbes: para muchos, el mejor cómic de la historia.

Tomado de Xerop.
Más cositas sobre Calvin y Hobbes aquí (español) y aquí (inglés)

Inauguración

¡Bienvenidos a Hilarísticos!

Nada más ver el título, probablemente os preguntéis, ¿de qué va esto? Pues bien, estáis ante un blog de humor, pero en el que no se va a hablar de humor en general, o en el que la servidora se va a limitar a linkear cosas graciosas con las que se tope por la red...

Pretendo que Hilarísticos sea un blog variado, en el que cualquier amante del buen humor pueda informarse, disfrutar, cultivarse y, por supuesto, echarse unas carcajadas.

Poco a poco voy a intentar ir perfeccionando la bitácora; con el tiempo trataré de ofreceros un buen blogroll con las páginas más interesantes que vaya encontrando por la red.

Espero que disfrutéis con el blog tanto como yo voy a disfrutar escribiéndolo.

Comentad, opinad, participad... y, sobre todo, ¡REÍD!